Trashumancia y hospitalidad como signos de los tiempos en la era de las expulsiones

Nemer E. Narchi

Presentación

Abrimos el volumen 40 contemplando un mundo dinámico y, por ahora, ininteligible en términos de migración. Esto es con un gobierno mexicano que promete blindar su frontera sur y, por otro lado, acoge a los migrantes centroamericanos en su frontera norte mientras estos esperan se dé resolución a sus peticiones de asilo por parte del gobierno de los EE.UU. En paralelo, casos como el de el geógrafo, amigo y colega Scott Warren, activista del colectivo No More Deaths y profesor de Geografía en la Universidad Estatal de Arizona y el de la capitana Pia Klemp, ponen de manifiesto una creciente criminalización de la compasión.1

El tinte político de la migración, materializado en la transhumancia y hospitalidad, pone de manifiesto la importancia de la sección temática de nuestro número 157 que pone atención, grosso modo, en la misericordia, el sufrimiento y la misión pastoral. Ello con el objetivo de registrar, analizar y entender los cambios impulsados desde la política eclesiástica y la fe para exhibir y combatir los abusos estructurales en contra de grupos migrantes y otros grupos humanos vulnerables. Así, a través del artículo “Predicar la misericordia. Los viajes apostólicos del papa Francisco en América”, Miguel J. Hernández nos hace ver, mediante el análisis de documentos oficiales de la Santa Sede, que la renovación de la Iglesia en el siglo XXI tiene en la misericordia uno de sus ejes principales y, sin embargo, es dentro de la misma institución que la promueve como eje rector, donde la misericordia encuentra su mayor oposición. El texto resulta relevante porque da cuenta del fin de una era mesiánica, resaltando, con ello, la necesidad de incentivar la acción colectiva por encima de la producción personal y la justicia por encima de lo estrictamente legal. “Usos políticos del sufrimiento en el Via Crucis del Migrante, Ixtepec, Oaxaca” de Yuri A. Inocente Escamilla, analiza los usos políticos del sufrimiento al ver el castigo del cuerpo como un discurso de protesta en el cual, mediante el abuso, se expresan los derechos políticos de los migrantes centroamericanos. A partir del reflejo y la analogía entre este “Jesus migrante” y el Jesús perseguido, se infiere que la vida del migrante yace perpetuamente en el Viernes Santo. El texto de Patricia E. Zamudio Grave “De misión por los migrantes: valores cristianos y acogida al extranjero” bien puede ofrecerse como una conclusión que integra los dos textos anteriores, pues nos habla de una revolución en la obra pastoral. Antes entendida como ayuda humanitaria y prestada bajo los cánones de la Doctrina Social Eclesiástica, la obra pastoral ahora se encuentra abocada a la defensa de los derechos humanos y la dignidad migrante. Este giro en la obra pastoral conlleva como meta, primero una revisión y, luego, una transformación profunda de las estructuras sociales que día a día robustecen los procesos de violencia y segregación.

En la sección Documentos, María del Carmen Ventura Patiño, presenta una revisión crítica a la Iniciativa de Ley de Desarrollo Agrario, mediante la discusión de diez puntos que, argumenta, la presentan como un documento antagónico a la propiedad social. El documento presenta un análisis de los beneficios y perjuicios que se perciben prima facie en la antes mencionada iniciativa. La autora pone de manifiesto que la aceptación de esta ley extendería la vida del orden neoliberal, albergando el potencial para seguir erosionando la protección de las tierras y el derecho al territorio.

Esteban Krotz, en la sección Notas y Debates, exhibe las “Claves para una estilística de la antropología política de Brigitte Boehm”, un manuscrito sencillo que describe la antropología crítica mexicana como se presenta en la obra de Brigitte Boehm. Las claves de Esteban Krotz, además de ayudarnos a entender e invitarnos a descubrir el enfoque de la Dra. Boehm como una antropología teórica, multidisciplinaria, evolucionista y antiideológica, sirve como honesto homenaje tanto al personaje como a su obra.

La Sección General de este número está conformada por cinco artículos. El primero, “Las ferias libres y el problema de las subsistencias: Santiago de Chile, 1939-1943” en autoría de Juan Carlos Yáñez Andrade, ofrece una mirada amplia al desabasto de comida en Santiago de Chile por efecto de la gran depresión estadounidense. Una de las alternativas al problema es el establecimiento de ferias libres, que en un principio no solo sirvieron como paliativo al desabasto, sino también como una alternativa al mercado tradicional. En este artículo resulta interesante ver que aunque instauradas en una lógica perpendicular a la del comercio establecido, el carácter independiente de las ferias libres termina por menguar ante el aparato municipal. “La erosión de la endogamia o de la dinámica del mestizaje. Aguascalientes, Nueva Galicia, siglos XVII y XVIII” de Víctor M. González Esparza habla de las castas y el mestizaje tierra adentro, haciendo ver, por medio del análisis de 200 años de registros parroquiales, que las interrelaciones, sobre todo, aquellas que inmiscuyen africanos y sus descendientes, son mucho más intensas en la región que lo antes supuesto. El autor señala que estas interrelaciones fueron, quizá, puestas en el olvido por un nacionalismo esencialista que finalmente fracasa en su condición homogeneizante cuando las subalteridades tienen apenas un resquicio por donde emerger. Una suerte de premonición relacionada a los actuales movimientos antivacunas, mediante el artículo “Los alcances de la inoculación y el impacto de la viruela de 1797 en la parroquia de San Agustín Jonacatepec”, América Molina del Villar, expone el caso del brote de viruela reportado en aquellos años en la localidad. Aunque fulminante para un buen número de infantes menores a los nueve años, el brote puede contenerse en las haciendas de Jonacatepec gracias a una campaña de inoculación, mostrando que, tanto antes como ahora, la teoría del germen resulta suficientemente robusta para evitar epidemias a pesar de los efectos secundarios que tanto hacen desconfiar en la medicina preventiva. El artículo de Mariana Terán Fuentes y Mónica Pérez Navarro, “Héroes para la nación. La edificación de la tradición septembrina mexicana”, ofrece un sentido análisis de los símbolos fundacionales de la nación mexicana. Específicamente refiere al uso político de la memoria histórica, que, mediante la selección cautelosa de fiestas, próceres e imágenes, sirve de herramienta ideológica para cribar una idea ética, racial, política y religiosa de la nación. Esta identidad aunque característica de la estructuración de los incipientes, pero flamantes, estados nacionales, se ofrece detallada para el preciso caso del Estado mexicano que, a fin de cuentas, resulta más una creación discursiva que una concreción donde debieran sumarse los hechos, las razas y los [anti] héroes. La sección cierra con un artículo de Teresa Santiago y Carlos Illades, “La guerra irregular en Guerrero, 2007-2017”, nos habla de un estado que aunque por mucho tiempo ha sido violento y conflictivo -recordemos la masacre de La Coprera en 1967-, enrarece su violencia con la reciente “guerra contra el narco”. Los autores demuestran que en lugar de servir como disuasivo a la violencia, los operativos que las fuerzas armadas efectúan en la región durante el periodo 2007-2017 dejan mayor descontrol y agravio en una sociedad ya de por sí trastocada por la impunidad, la ocupación, el despojo, el cacicazgo y, finalmente, la violación constante de derechos humanos. En suma, los autores dejan ver que, sin persecución real de la impunidad, la estrategia no puede sino agrandar la situación en este complejo estado mexicano.

Hemos incluido en este número una amplia sección de reseñas, todas con mérito propio para ser leídas. No obstante su importancia, quisiera gastar las últimas líneas de este espacio para celebrar y agradecer al Dr. Víctor Gayol y al resto del equipo editorial de Relaciones Estudios de Historia y Sociedad por llevar a buen puerto la dirección de la revista. Muchos son los aspectos que han mejorado, sobre todo el alcance digital de Relaciones. Seguiremos mejorando y ante la confianza que en marzo ha delegado el Colegio de Michoacán en mí para dirigir la revista, solo puedo decir que es un honor y un privilegio. A título personal y movido por esta, nuestra primer sección temática de 2019, expreso mi absoluta solidaridad con Scott Warren y todos los defensores de los derechos humanos, quienes desinteresadamente arriesgan la vida día a día.

Nemer E. Narchi

Notas

1 Scott Warren, podría enfrentar hasta 20 años de cárcel por ofrecer agua y comida a dos personas cerca de la frontera, con lo que la parte acusatoria alega: ayudó a estas personas a evadir la patrulla fronteriza. La capitana Pia Klemp y gran parte de la tripulación del barco Iuventa, enfrentan cargos criminales en Italia por haber salvado del ahogamiento a más de mil migrantes.